25. Entonces el rey Darío escribió a todos los pueblos, naciones y lenguas que habitaban en toda la tierra: "Que abunde su paz.
26. De parte mía se proclama un decreto de que en todo el dominio de mi reino todos teman y tiemblen delante del Dios de Daniel, Porque El es el Dios viviente que permanece para siempre, Y Su reino no será destruido Y Su dominio durará para siempre.
27. El es el que libra y rescata, hace señales y maravillas En el cielo y en la tierra, El que ha librado a Daniel del poder de los leones."
28. Y este mismo Daniel prosperó durante el reinado de Darío y durante el reinado de Ciro el Persa.