Antiguo Testamento

Nuevo Testamento

Cantares 5:5-15 Nueva Biblia Latinoamericana de Hoy (NBLH)

5. Yo me levanté para abrir a mi amado; Y mis manos destilaron mirra, Y mis dedos mirra líquida, Sobre las manecillas de la cerradura.

6. Abrí yo a mi amado, Pero mi amado se había retirado, se había ido. Tras su hablar salió mi alma. Lo busqué, y no lo hallé; Lo llamé, y no me respondió.

7. Me hallaron los guardas que rondan la ciudad, Me golpearon y me hirieron; Me quitaron de encima mi chal los guardas de las murallas.

8. Yo les ruego, oh hijas de Jerusalén, Si encuentran a mi amado, ¿Qué le han de decir?: Que estoy enferma de amor."

9. "¿Qué clase de amado es tu amado, Oh la más hermosa de las mujeres? ¿Qué clase de amado es tu amado, Que así nos ruegas?"

10. "Mi amado es apuesto y sonrosado, Distinguido entre diez mil.

11. Su cabeza es como oro, oro puro, Sus cabellos, como racimos de dátiles, Negros como el cuervo.

12. Sus ojos son como palomas Junto a corrientes de agua, Bañados en leche, Colocados en su engaste.

13. Sus mejillas, como eras de bálsamo, Como riberas de hierbas aromáticas; Sus labios son lirios Que destilan mirra líquida.

14. Sus manos son barras de oro Engastadas de berilo; Su vientre es marfil tallado Recubierto de zafiros.

15. Sus piernas son columnas de alabastro Asentadas sobre basas de oro puro; Su aspecto es como el Líbano, Gallardo como los cedros.

Leer capítulo completo Cantares 5