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2 Samuel 14:17-25 Nueva Biblia Latinoamericana de Hoy (NBLH)

17. Se dijo además su sierva: 'Sea de consuelo la palabra de mi señor el rey, pues como el ángel de Dios, así es mi señor el rey para discernir el bien y el mal. ¡Que el Señor su Dios sea con usted!'"

18. Respondió el rey y dijo a la mujer: "Te ruego que no me ocultes nada de lo que voy a preguntarte." "Hable mi señor el rey," le dijo la mujer.

19. Y el rey dijo: "¿Está contigo la mano de Joab en todo esto?" Y la mujer respondió: "Vive su alma, mi señor el rey, nadie puede desviarse ni a la derecha ni a la izquierda de todo lo que mi señor el rey ha hablado. En verdad fue su siervo Joab quien me mandó, y fue él quien puso todas estas palabras en boca de su sierva;

20. su siervo Joab ha hecho esto con el fin de cambiar el aspecto de las cosas. Pero mi señor es sabio, como con la sabiduría del ángel de Dios, para saber todo lo que hay en la tierra."

21. Entonces el rey dijo a Joab: "Mira, ciertamente ahora haré esto; ve y trae al joven Absalón."

22. Joab cayó rostro en tierra, y postrándose, bendijo al rey. Entonces Joab dijo: "Oh rey mi señor, hoy su siervo sabe que he hallado gracia ante sus ojos, puesto que el rey ha concedido la petición de su siervo."

23. Joab se levantó, fue a Gesur y trajo a Absalón a Jerusalén.

24. Pero el rey dijo: "Que vuelva a su casa y no vea mi rostro." Y Absalón volvió a su casa, y no vio el rostro del rey.

25. En todo Israel no había nadie tan bien parecido ni tan celebrado como Absalón. Desde la planta de su pie hasta su coronilla no había defecto en él.

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