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2 Reyes 4:1-11 Nueva Biblia Latinoamericana de Hoy (NBLH)

1. Y una mujer de las mujeres de los hijos de los profetas clamó a Eliseo, diciendo: "Su siervo, mi marido, ha muerto, y usted sabe que su siervo temía al Señor; y ha venido el acreedor a tomar a mis dos hijos para esclavos suyos."

2. Y Eliseo le dijo: "¿Qué puedo hacer por ti? Dime qué tienes en casa." Y ella respondió: "Su sierva no tiene en casa más que una vasija de aceite."

3. Entonces Eliseo le dijo: "Ve, pide vasijas prestadas por todas partes de todos tus vecinos, vasijas vacías; no pidas pocas.

4. Luego entra y cierra la puerta detrás de ti y de tus hijos y echas el aceite en todas estas vasijas, poniendo aparte las que estén llenas."

5. Y ella se fue de su lado, y cerró la puerta tras sí y de sus hijos; y ellos traían las vasijas y ella echaba el aceite.

6. Cuando las vasijas estuvieron llenas, ella dijo a un hijo suyo: "Tráeme otra vasija." Y él le dijo: "No hay más vasijas." Y cesó el aceite.

7. Entonces ella fue y se lo contó al hombre de Dios. Y él le dijo: "Ve, vende el aceite y paga tu deuda, y tú y tus hijos pueden vivir de lo que quede."

8. Un día pasaba Eliseo por Sunem, donde había una mujer distinguida, y ella lo persuadió a que comiera. Y sucedía que siempre que pasaba, entraba allí a comer.

9. Y ella dijo a su marido: "Ahora entiendo que éste que siempre pasa por nuestra casa, es un santo hombre de Dios.

10. Te ruego que hagamos un pequeño aposento alto, con paredes, y pongamos allí para él una cama, una mesa, una silla y un candelero; y cuando venga a nosotros, se podrá retirar allí."

11. Y un día que Eliseo vino por allí, se retiró al aposento alto y allí se acostó.

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