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Lucas 5:4-16 Nueva Biblia al Día (NBD)

4. Cuando terminó de hablar, le dijo a Simón:—Lleva la barca adonde el agua está más profunda y allí echa tus redes para pescar.

5. Simón le respondió:—Maestro, toda la noche hemos trabajado sin descanso y no hemos pescado nada. Pero, puesto que tú me lo mandas, voy a echar las redes.

6. Ellos hicieron lo que él les dijo, y recogieron tantos peces que las redes se les rompían.

7. Entonces hicieron señas a sus compañeros de la otra barca para que fueran a ayudarlos. Ellos fueron, y llenaron tanto las dos barcas que se empezaron a hundir.

8. Cuando Simón Pedro vio esto, cayó de rodillas ante Jesús y le dijo:—¡Apártate de mí, Señor, porque soy un pecador!

9. Es que él y sus demás compañeros estaban asombrados por la gran pesca que habían hecho.

10. También estaban asombrados Jacobo y Juan, hijos de Zebedeo, socio de Simón.Jesús le dijo a Simón:—No tengas miedo, de ahora en adelante serás pescador de seres humanos.

11. Entonces llevaron las barcas a tierra, lo dejaron todo y siguieron a Jesús.

12. Un día que Jesús estaba en un pueblo, se presentó un hombre enfermo de lepra. Al ver a Jesús, se inclinó hasta tocar con su rostro el suelo y le suplicó:—Señor, si quieres, puedes sanarme.

13. Jesús extendió la mano, tocó al hombre y le dijo:—Sí quiero. ¡Queda sano!Y en ese momento se le quitó la lepra.

14. Jesús le ordenó:—No se lo digas a nadie. Ve, preséntate al sacerdote y lleva la ofrenda de purificación que Moisés ordenó, para que les sirva de testimonio.

15. Sin embargo, Jesús se hacía cada vez más famoso, y mucha gente iba para oírlo y para que la sanara de sus enfermedades.

16. Pero él con frecuencia se apartaba a lugares solitarios para orar.

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