13. Antes de partir, llamó a diez de sus empleados y le entregó a cada uno una buena cantidad de dinero. Les dijo: “Hagan negocio con este dinero hasta que yo vuelva”.
14. Pero la gente de su país lo odiaba y mandaron un grupo de personas tras él para que dijeran: “No queremos que éste sea nuestro rey”.
15. »A pesar de todo, fue coronado rey. Cuando regresó a su país, ordenó llamar a los diez empleados a quienes les había entregado dinero, para ver cuánto habían ganado.
16. El primero se presentó y le dijo: “Señor, su dinero ha ganado diez veces más de lo que usted me dejó”.
17. El rey le respondió: “¡Muy bien, eres un buen empleado! Como has sido fiel en lo poco que te entregué, te nombro gobernador de diez ciudades”.
18. »El segundo se presentó y le dijo: “Señor, su dinero ha ganado cinco veces más de lo que usted me dejó”.
19. El rey le respondió: “A ti te nombro gobernador de cinco ciudades”.
20. »Llegó el otro empleado y dijo: “Señor, aquí está su dinero. Lo envolví en un pañuelo y lo guardé.
21. Tenía miedo porque usted es un hombre muy exigente que recoge lo que no depositó y cosecha lo que no sembró”.
22. Entonces el rey le contestó: “Eres un empleado malo. Con tus mismas palabras te voy a juzgar. Si sabías que soy muy exigente, que recojo lo que no deposité y cosecho lo que no sembré,
23. ¿por qué no depositaste mi dinero en el banco, para que cuando yo regresara ganara los intereses?”
24. Entonces, les dijo a los que estaban allí: “Quítenle el dinero y dénselo al que ganó diez veces más”.
25. Pero, ellos le dijeron: “Señor, pero si él ya tiene diez veces más”.