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Lucas 12:32-45 Nueva Biblia al Día (NBD)

32. »No tengan miedo, mi pequeño rebaño, porque el Padre de ustedes, en su bondad, quiere darles el reino.

33. Vendan lo que tienen, y den a los pobres. Hagan para ustedes bolsas que no se desgasten; guarden en el cielo un tesoro que no se acabe. Allí no hay ladrón que robe ni polilla que destruya.

34. Donde ustedes tengan su tesoro, allí tendrán también su corazón.

35. »Estén siempre listos, con la ropa bien ajustada y la lámpara encendida,

36. como los sirvientes que esperan a que su señor regrese de un banquete de bodas, para abrirle la puerta en el momento en que él llegue y toque.

37. Dichosos los sirvientes a los que su Señor encuentre atentos a su llegada. Les aseguro que se ajustará la ropa, hará que los sirvientes se sienten a la mesa y él mismo se pondrá a servirles.

38. Dichosos los sirvientes a los que su señor encuentre preparados sin importar si llega a la media noche o de madrugada.

39. Dense cuenta de esto: Si el dueño de una casa supiera la hora a la que va a llegar el ladrón, estaría atento para no dejarlo entrar.

40. Así ustedes estén siempre preparados, porque el Hijo del hombre vendrá cuando menos lo esperen.

41. Pedro le preguntó:—Señor, ¿a quién le cuentas esta parábola?, ¿sólo a nosotros o también a todos los demás?

42. El Señor le respondió:—¿Quién es el mayordomo fiel y atento al que su señor deja encargado de los otros sirvientes para darles la comida a tiempo?

43. Dichoso el sirviente al que su señor, al regresar, encuentra cumpliendo con su deber.

44. Les aseguro que lo pondrá a cargo de todos sus bienes.

45. Pero si el sirviente piensa: “Mi señor va a tardar en volver”, y comienza a golpear a los criados y a las criadas, y a comer y a beber y a emborracharse, se verá en serios problemas.

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