3. Tú haces que el ser humano vuelva al polvo, cuando dices: «Vuelve al polvo».
4. ¡Mil años son como el día de ayer para ti! ¡Son como unas cuantas horas!
5. Acabas con la gente como si fueran sueños que desaparecen; como hierba que nace en la mañana,
6. que al amanecer brota verde y fresca, y por la noche ya está marchita y seca.
7. Morimos bajo tu ira; tu enojo es como una carga muy pesada para nosotros.
8. Frente a ti extiendes nuestros pecados, nuestros pecados secretos, y los ves todos.