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Jeremías 48:33-41 Nueva Biblia al Día (NBD)

33. El júbilo y la alegría se fueron de la fértil Moab. Ya los lagares no dan vino; no hay quien exprima las uvas bajo sus pies mientras entona canciones alegres. Gritos hay, sí, ¡pero no de alegría!

34. Se levantan en cambio horribles gritos de terror por todo el país, desde Hesbón hasta Elealé y Yahaza, desde Zoar hasta Joronayin y Eglat Selisiyá. Los prados de Nimrín han quedado desiertos.

35. Porque el SEÑOR dice: ¡Yo acabé con la práctica de ofrecer homenajes a los falsos dioses y la ofrenda de perfumes delicados a los ídolos que realiza Moab!

36. En mi corazón hay mucha pesadumbre por Moab y Quir Jeres, pues toda su prosperidad se ha esfumado en un dos por tres.

37. Angustiados, los hombres se rasuran la cabeza y la barba, se hieren el cuerpo y visten saco penitencial.

38. En todo hogar de Moab y en las calles habrá llanto y dolor porque descargué mi golpe y rompí a Moab como a cacharro viejo e inútil.

39. ¡Cómo quedó quebrantada! ¡Oigan sus gemidos! ¡Miren la vergüenza de Moab! Porque ella constituye ahora ejemplo de horror y burla para sus vecinos.

40. El SEÑOR se levanta sobre el país de Moab como si fuera un águila en vuelo.

41. Sus ciudades han sido destruidas, sus fortalezas defensivas han sido tomadas. A sus más fuertes guerreros les tiembla el corazón de miedo como a mujer ante los dolores del parto.

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