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Jeremías 12:9-14 Nueva Biblia al Día (NBD)

9. Mi pueblo se ha convertido en una presa deseada, de tal manera que sobre él se cierne una multitud de buitres y bestias salvajes que quieren devorarlo.

10. Muchos gobernantes extranjeros han asolado a mi pueblo como si fuera un viñedo maltratado, pisoteando las vides y transformando su belleza en estéril desierto.

11. Lo han desolado; escucho sus amargos lamentos. Toda la tierra de Israel está desolada y nadie se duele por ello.

12. Ejércitos destructores saquean la tierra. El SEÑOR se vale de ellos como si fueran una espada y con ella causa gran destrozo. ¡No hay donde ocultarse de la destrucción; nadie escapará!

13. Mi pueblo sembró trigo y cosechó espinos; trabajaron afanosamente, pero sin provecho. Tendrán cosecha tan raquítica que se avergonzarán de ella, y es que sobre ellos pesa la tremenda cólera del SEÑOR.

14. Y ahora el SEÑOR dice así a las naciones perversas, las que rodean la tierra que Dios dio a su pueblo Israel: ¡Miren, de su tierra los echaré así como Judá será echada de la suya!

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