Antiguo Testamento

Nuevo Testamento

Isaías 63:7-16 Nueva Biblia al Día (NBD)

7. De la amorosa bondad de Dios hablaré. Lo elogiaré por todo lo que ha hecho; me regocijaré por su gran bondad para con Israel, otorgada según su misericordia y amor.

8. Él dijo:Míos son, sin duda no volverán a serme desleales.Y él se convirtió en su Salvador,

9. y los libró de todas sus aflicciones. No fue ningún enviado del SEÑOR, sino que él en persona, motivado por su amor y piedad, los redimió, los levantó y los condujo todos aquellos años antiguos.

10. ¡Pero ellos volvieron a rebelarse y ofendieron a su Santo Espíritu! Por eso se transformó él en su adversario y los combatió personalmente.

11. Entonces ellos recordaron los días de antaño cuando Moisés, siervo de Dios, sacó de Egipto a su pueblo y clamaron:¿Dónde está el que sacó a Israel a través del mar, con Moisés como pastor suyo? ¿Dónde está el Dios que envió su santo Espíritu a morar entre su pueblo?

12. ¿Dónde está aquél cuyo gran poder abrió el mar ante ellos cuando Moisés levantó la mano, y estableció para siempre su fama?

13. ¿Quién los llevó por el fondo del mar? Fueron como airosos caballos que corren por el desierto, y jamás tropezaron.

14. Como ganado que pace en los valles, el Espíritu del SEÑOR les dio reposo. De este modo se dio a sí mismo magnífico renombre.

15. El pueblo de Israel oró a Dios y le dijo: ¡Oh SEÑOR, mira desde el alto cielo y contémplanos desde tu santa y gloriosa morada! ¿Dónde está el amor que nos tenías, tu poder, misericordia y compasión? ¿Dónde están ahora?

16. ¡Ciertamente aún eres nuestro Padre! Aunque Abraham y Jacob nos desconocieran, tú serías nuestro Padre, nuestro Liberador desde la antigüedad.

Leer capítulo completo Isaías 63