4. En estos cuarenta años tus vestiduras no se han envejecido ni se te han hinchado los pies.
5. Así podrás comprender que como un padre disciplina a sus hijos, el SEÑOR te disciplina para ayudarte.
6. »Obedece los mandamientos del SEÑOR tu Dios, vive de acuerdo con su voluntad y dale la honra que se merece.
7. Porque el SEÑOR tu Dios te está llevando a una buena tierra, tierra de arroyos, de pozos; de manantiales, de valles y de montes;