Antiguo Testamento

Nuevo Testamento

Santiago 3:3 La Palabra Versión Hispanoamericana (BLPH)

Y si no, vean cómo conseguimos que nos obedezcan los caballos: poniéndoles un freno en la boca, somos capaces de dirigir todo su cuerpo.

Leer capítulo completo Santiago 3

Ver Santiago 3:3 en contexto