1. ¿Querrá todo esto decir que debemos seguir pecando para que se desborde la gracia?
2. ¡De ningún modo! Quienes hemos muerto al pecado, ¿cómo vamos a seguir viviendo sometidos a él?
3. ¿No saben ustedes que, al ser vinculados a Cristo por el bautismo, fuimos vinculados también a su muerte?