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Mateo 4:4-17 La Palabra Versión Hispanoamericana (BLPH)

4. Jesús le contestó:—Las Escrituras dicen: No solo de pan vivirá el hombre, sino de toda palabra pronunciada por Dios.

5. El diablo lo llevó luego a la ciudad santa, lo subió al alero del Templo

6. y le dijo:—Si de veras eres Hijo de Dios, tírate abajo, porque dicen las Escrituras: Dios ordenará a sus ángeles que cuiden de ti y te tomen en sus manos para que tu pie no tropiece con ninguna piedra.

7. Jesús le contestó:—También dicen las Escrituras: No pondrás a prueba al Señor tu Dios.

8. De nuevo el diablo lo llevó a un monte muy alto y, mostrándole todas las naciones del mundo y su esplendor,

9. le dijo:—Yo te daré todo esto si te arrodillas ante mí y me adoras.

10. Pero Jesús le replicó:—Vete de aquí, Satanás, pues dicen las Escrituras: Al Señor tu Dios adorarás y solo a él darás culto.

11. El diablo se apartó entonces de Jesús, y llegaron los ángeles para servirle.

12. Al enterarse Jesús de que Juan había sido encarcelado, se retiró a Galilea.

13. Pero no fue a Nazaret* sino que fijó su residencia en Cafarnaún*, junto al lago*, en los términos de Zabulón y Neftalí,

14. en cumplimiento de lo dicho por medio del profeta Isaías:

15. ¡Tierra de Zabulón y Neftalí, camino del mar, al oriente del Jordán, Galilea de los paganos!

16. El pueblo sumido en las tinieblas vio una luz resplandeciente; a los que vivían en país de sombra de muerte, una luz los alumbró.

17. A partir de aquel momento, Jesús comenzó a predicar diciendo:—Conviértanse, porque ya está cerca el reino de los cielos.

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