42. Porque estuve hambriento, y no me dieron de comer; estuve sediento, y no me dieron de beber;
43. llegué como un extraño, y no me recibieron en sus casas; me vieron sin ropa y no me la dieron; estuve enfermo y en la cárcel, y no me visitaron».
44. Entonces ellos contestarán: «Señor, ¿cuándo te vimos hambriento, o sediento, o como un extraño, o sin ropa, o enfermo, o en la cárcel y no te ofrecimos ayuda?».
45. Y él les dirá: «Les aseguro que cuanto no hicieron en favor de estos más pequeños, tampoco conmigo lo hicieron».