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Lucas 8:29-33 La Palabra Versión Hispanoamericana (BLPH)

29. Es que Jesús había ordenado al espíritu impuro que saliera de aquel hombre, pues muchas veces le provocaba violentos arrebatos; y a pesar de que habían intentado sujetarlo con cadenas y grilletes, él rompía las ataduras y se escapaba a lugares desiertos empujado por el demonio.

30. Jesús le preguntó:—¿Cómo te llamas?Él le contestó:—Me llamo «Legión».Porque eran muchos los demonios que habían entrado en él.

31. Y rogaban a Jesús que no los mandara volver al abismo.

32. Había allí una considerable piara de cerdos paciendo por el monte; los demonios rogaron a Jesús que les permitiera entrar en los cerdos; y Jesús se lo permitió.

33. Entonces los demonios salieron del hombre y entraron en los cerdos. Al instante, la piara se lanzó pendiente abajo hasta el lago, donde los cerdos se ahogaron.

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