1. Que no decaiga el amor fraterno.
2. No echen en olvido la hospitalidad, pues, gracias a ella, personas hubo que, sin saberlo, alojaron ángeles en su casa.
3. Tengan siempre presentes a los encarcelados como si ustedes mismos se encontraran presos junto con ellos; y también a los que sufren malos tratos, como si ustedes estuvieran en su lugar.
4. Que todos respeten el matrimonio y mantengan limpia su vida conyugal, pues Dios juzgará con severidad a los adúlteros y lujuriosos.