14. Por todo lo cual me pongo de rodillas ante el Padre,
15. origen de toda paternidad tanto en el cielo como en la tierra,
16. y le pido que, conforme a la riqueza de su gloria, su Espíritu los llene de fuerza y energía hasta lo más íntimo del ser.
17. Que Cristo habite, por medio de la fe, en el centro de la vida de ustedes y que el amor les sirva de cimiento y de raíz.
18. Serán así capaces de entender, en unión con todos los creyentes, cuán largo y ancho, cuán alto y profundo