8. teniendo en cuenta que el ejercicio corporal no sirve para mucho y, en cambio, una vida auténticamente religiosa es útil para todo; además, cuenta con la promesa de la vida, tanto presente como futura.
9. Es esta una palabra digna de crédito y que debe aceptarse sin reservas.
10. En efecto, si nos fatigamos y luchamos*, es porque hemos puesto la esperanza en Dios viviente, que es salvador de todos, especialmente de los creyentes.
11. Enseña y recomienda estas cosas.