28. Entonces Moisés dio estas instrucciones al sacerdote Eleazar, a Josué, hijo de Nun, y a los jefes de clan de las tribus israelitas.
29. Les dijo al respecto Moisés:—Si los gaditas y rubenitas, debidamente pertrechados, cruzan con ustedes el Jordán, dispuestos a presentar batalla, siguiendo las indicaciones del Señor, una vez que el país les quede sometido, les darán la tierra de Galaad en posesión.
30. Pero si no cruzan con ustedes [el Jordán] debidamente pertrechados, entonces recibirán su heredad junto con ustedes en el país de Canaán.
31. Los gaditas y los rubenitas respondieron:—Haremos lo que el Señor ha dicho a tus siervos.
32. Nosotros pasaremos al país de Canaán debidamente pertrechados, siguiendo las indicaciones del Señor, si de esta manera podemos mantener* nuestra posesión hereditaria a este lado del Jordán.
33. Así pues, Moisés asignó a los gaditas, a los rubenitas y a la media tribu de Manasés, hijo de José, el reino de Sejón, rey amorreo, y el reino de Og, rey de Basán, todo el país con sus ciudades y los territorios de las ciudades de alrededor.