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Jueces 9:21-39 La Palabra Versión Hispanoamericana (BLPH)

21. Después de esto, Jotán huyó y se puso a salvo en Beer, donde se estableció, lejos del alcance de su hermano Abimélec.

22. Abimélec gobernó durante tres años en Israel.

23. Pero Dios envió un espíritu de discordia entre Abimélec y los señores de Siquén hasta el punto de que estos traicionaron a Abimélec,

24. para que el crimen cometido contra los setenta hijos de Jerubaal fuera vengado y su sangre cayera sobre su hermano Abimélec, que los había asesinado, y sobre los señores de Siquén que le habían ayudado a asesinar a sus hermanos.

25. Los señores de Siquén pusieron contra él emboscadas en las cumbres de los montes y saqueaban a todo el que pasaba cerca por el camino. Se dio aviso de ello a Abimélec.

26. Gaal, hijo de Obed, acompañado de sus hermanos, vino a Siquén y se ganó la confianza de los señores de Siquén.

27. Salieron estos al campo a vendimiar sus viñas, pisaron las uvas, hicieron fiesta y entraron en el templo de su dios. Comieron y bebieron y maldijeron a Abimélec.

28. Entonces Gaal, hijo de Obed, exclamó:—¿Quién es Abimélec y quién es Siquén para que tengamos que servirlos? ¿No es verdad que tanto el hijo de Jerubaal, como Zebul, su lugarteniente, sirvieron a la gente de Jamor, padre de Siquén? ¿Por qué hemos de servirles ahora nosotros?

29. ¡Ojalá tuviera poder sobre este pueblo! Yo derrocaría a Abimélec y le diría: «Organiza tu ejército y sal a pelear».

30. Al enterarse Zebul, gobernador de la ciudad, de la propuesta de Gaal, hijo de Obed, montó en cólera

31. y envió secretamente mensajeros a Abimélec, con este aviso:—Gaal, hijo de Obed, ha llegado a Siquén con sus hermanos y está soliviantando a la ciudad contra ti.

32. Sal esta misma noche, con la gente que tienes contigo, y pon una emboscada en el campo;

33. por la mañana temprano, en cuanto amanezca, te pones en marcha y atacas a la ciudad. Cuando Gaal salga a tu encuentro con su gente, harás con él lo que te acomode.

34. Abimélec salió de noche con todas las tropas de que disponía y pusieron una emboscada frente a Siquén, repartiéndose en cuatro grupos.

35. Cuando Gaal, hijo de Obed, salió y se detuvo a la entrada de la puerta de la ciudad, Abimélec y la tropa que lo acompañaba surgieron de la emboscada.

36. Gaal vio la tropa y dijo a Zebul:—Mira cuánta gente baja de las cumbres de los montes.Zebul le respondió:—Es la sombra de los montes lo que ves y te parecen hombres.

37. Gaal insistió:—No, sino que es gente que baja por la ladera del Ombligo de la Tierra*; y otro grupo viene por el camino de la encina de los Adivinos.

38. Zebul le dijo entonces:—¿Dónde está ahora lo que decías: «Quién es Abimélec para que le sirvamos?». ¿No es esa la gente que despreciabas? Sal, pues, ahora y hazles frente.

39. Gaal salió al mando de los señores de Siquén y presentó batalla a Abimélec.

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