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Josué 2:3-10 La Palabra Versión Hispanoamericana (BLPH)

3. El rey de Jericó mandó este recado a Rajab:—Haz salir a los hombres que han entrado en tu casa, porque han venido para reconocer toda la región.

4. Pero la mujer escondió a los dos hombres y respondió:—Es cierto que esos hombres han venido a mi casa, pero yo no sabía de dónde procedían;

5. cuando, al anochecer, estaba a punto de cerrarse la puerta de la ciudad, esos hombres salieron y no sé a dónde han ido. Si ustedes se dan prisa en perseguirlos, los alcanzarán.

6. Pero ella los había hecho subir a la terraza y los había escondido entre unos manojos de lino que tenía amontonados allí.

7. Salieron unos hombres en su persecución hacia los vados del Jordán, y la puerta de la ciudad se volvió a cerrar en cuanto los perseguidores salieron tras ellos.

8. Todavía no se habían acostado los espías, cuando Rajab subió a la terraza, donde ellos estaban,

9. y les dijo:—Ya sé que el Señor les ha entregado esta tierra, que nos ha invadido el pánico y que todos los habitantes de esta región tiemblan ante ustedes.

10. Nos hemos enterado de cómo el Señor secó las aguas del mar de las Cañas* delante de ustedes cuando salieron de Egipto, y de lo que han hecho con los dos reyes amorreos del otro lado del Jordán, con Sijón y con Og, a quienes ustedes consagraron al exterminio.

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