Antiguo Testamento

Nuevo Testamento

Jeremías 4:6-19 La Palabra Versión Hispanoamericana (BLPH)

6. Alcen la enseña hacia Sión;en marcha, no se detengan,pues traigo una desgracia del norte,acompañada de una gran calamidad.

7. Sube un león de la espesura,se apresta un destructor de pueblos;ya está saliendo de su escondrijopara hacer de tu tierra un erial;tus ciudades serán incendiadas,todas quedarán deshabitadas.

8. Vístanse, pues, de sayal;hagan duelo y laméntense,que no se aparta de nosotrosel incendio de la ira del Señor.

9. Aquel día —oráculo del Señor—se hundirá el ánimo del reyy también el de los príncipes;los sacerdotes quedarán espantados,los profetas sin palabras.

10. Yo dije: «Ay, Señor mi Dios, ciertamenteengañaste a este pueblo y a Jerusalén,pues dijiste que tendrían paz,pero la espada amenaza su garganta».

11. En aquel tiempo dirána este pueblo y a Jerusalén:«Un aire sofocante llega de las dunas,avanza por el desierto camino de la capital».No es un viento para aventar o cribar,

12. sino un viento poderoso* a mis órdenes.Ahora es el momento de lanzarmis acusaciones contra ellos.

13. Mírenlo avanzar como las nubes,sus carros igual que el torbellino,sus caballos más ligeros que las águilas.¡Ay de nosotros, seremos devastados!

14. Limpia tu corazón de maldad,Jerusalén, si quieres salvarte.¿Hasta cuándo ocuparán tu pechotantos proyectos criminales?

15. La voz de un mensajero llega desde Dan,noticias de muerte de la montaña de Efraín.

16. Comuniquen esto a las naciones,háganlo saber en Jerusalén:Llegan dando gritos de tierras lejanas,lanzan sus voces contra los pueblos de Judá;

17. te asedian en torno como guardias de campo,por haberte rebelado contra mí—oráculo del Señor—.

18. Tu propia conducta y tus accioneste han acarreado estas cosas;tu maldad ha acabado en amargura,te ha penetrado hasta el corazón.

19. ¡Ay mis entrañas, mis entrañas!¡Cómo me tiembla el corazón!Tengo el corazón palpitando,no puedo seguir en silencio.He oído el sonido de la trompeta,el alarido que preludia la guerra;

Leer capítulo completo Jeremías 4