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Jeremías 11:8-19 La Palabra Versión Hispanoamericana (BLPH)

8. Pero no escucharon ni prestaron atención, sino que todos siguieron la maldad de su mente retorcida. Por eso hice caer sobre ellos todas las amenazas de esta alianza que les ordené cumplir y no cumplieron.

9. El Señor me dijo:—Se ha descubierto una conjura entre la gente de Judá y los habitantes de Jerusalén.

10. Han vuelto a los pecados de sus antepasados, que se negaron a escuchar mis palabras: van detrás de dioses extranjeros y les dan culto; tanto Israel como Judá han roto la alianza que hice con sus antepasados.

11. Por eso, así dice el Señor:—Voy a traerles una desgracia de la que no podrán escapar; me llamarán a gritos, pero no pienso escucharlos.

12. Las ciudades de Judá y los habitantes de Jerusalén irán a invocar a los dioses a quienes quemaban incienso, pero no podrán auxiliarlos cuando llegue la desgracia.

13. Tenías tantos dioses como ciudades, Judá; y en cada una de las calles de Jerusalén construiste otros tantos altares para quemar incienso a Baal.

14. En cuanto a ti, no intercedas por este pueblo, ni eleves por ellos gritos ni súplicas, pues no pienso escucharlos cuando me invoquen en el momento de la desgracia.

15. ¿Qué hace mi amada en mi casa,cuando ha cometido tantas vilezas?¿Crees que promesas y sacrificiospodrán apartar de ti la desgracia?¿Podrás entonces celebrarlo a gritos?

16. Olivo verde de hermoso frutote puso por nombre el Señor;pero ahora te ha prendido fuegoy tus ramas serán consumidas.

17. El Señor del universo, que te plantó, ha decretado una desgracia contra ti, a causa de la maldad de Israel y de Judá, de todo lo que hicieron para irritarme, quemando incienso a Baal.

18. El Señor me lo explicó y lo supe.Señor, me hiciste ver lo que tramaban.

19. Yo era un cordero llevado al matadero;no sabía que andaban maquinando mi muerte:«Destruyamos el árbol en pleno verdor,vamos a arrancarlo del mundo de los vivos,que su nombre no vuelva a ser mencionado».

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