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Génesis 27:22-28 La Palabra Versión Hispanoamericana (BLPH)

22. Y Jacob se acercó a Isaac, su padre, que palpándolo dijo:—La voz es la de Jacob, pero las manos son de Esaú.

23. Así que no lo reconoció porque sus manos eran velludas como las de su hermano Esaú. Ya se disponía a bendecirlo

24. cuando volvió a preguntarle:—¿Eres tú de verdad mi hijo Esaú?Jacob contestó:—Lo soy.

25. Entonces su padre le dijo:—Sírveme de lo que has cazado, hijo mío, para que coma, y te daré mi bendición.Jacob sirvió de comer a su padre, y comió; también le sirvió vino, y bebió.

26. Después Isaac, su padre, le dijo:—Acércate ahora, hijo mío, y bésame.

27. Cuando Jacob se acercó para besarlo, Isaac le olió la ropa. Entonces lo bendijo con estas palabras:«El aroma de mi hijoes como el aroma de un campoque el Señor ha bendecido.

28. Que Dios te conceda del cielo el rocío,y de la tierra una abundante cosechade vino y de trigo.

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