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Ezequiel 39:13-27 La Palabra Versión Hispanoamericana (BLPH)

13. Toda la gente del país tomará parte en el enterramiento, y redundará en su honor el día en que yo aparezca en mi gloria —oráculo del Señor Dios—.

14. Elegirán a un grupo de personas dedicadas exclusivamente a recorrer el país y a enterrar a los que hayan quedado esparcidos por el suelo, para purificarlo. Comenzarán la búsqueda al cabo de siete meses.

15. Cuando el grupo elegido recorra el país, si alguien ve huesos humanos, pondrá una señal junto a ellos para que los sepultureros los entierren en el valle del ejército de Gog

16. y así purifiquen el país. También una ciudad recibirá el nombre de Hamoná.

17. En cuanto a ti, hijo de hombre, esto dice el Señor Dios: Di a las aves de todas las clases y a todas las bestias del campo: reúnanse, vengan, júntense de los alrededores y participen en el sacrificio de proporciones gigantescas que voy a ofrecerles en los montes de Israel: comerán carne y beberán sangre.

18. Comerán carne de militares y beberán sangre de los príncipes de la tierra: todos son carneros, corderos, machos cabríos y rollizos toros de Basán.

19. Comerán grasa hasta hartarse; beberán sangre hasta emborracharse cuando participen en el sacrificio que voy a ofrecerles.

20. Se hartarán en mi mesa de caballos, jinetes, oficiales y soldados. —Oráculo del Señor Dios—.

21. Manifestaré mi gloria entre las naciones; todas las naciones serán testigos del juicio que voy a celebrar, cuando descargue mi mano sobre ellos.

22. Y, a partir de aquel día, Israel reconocerá que yo soy el Señor su Dios.

23. Y las naciones reconocerán que Israel padeció el destierro a causa de sus pecados, pues me fueron infieles. Tuve que privarlos de mi presencia y los entregué en manos de sus enemigos: todos cayeron víctimas de la espada.

24. Los traté como merecían su conducta inmoral y sus rebeldías: tuve que privarlos de mi presencia.

25. Por eso, así dice el Señor Dios: Ahora cambiaré la suerte* de Jacob, me compadeceré de toda la comunidad de Israel y defenderé con pasión mi santo nombre.

26. Una vez que se instalen en su tierra y vivan tranquilos sin que nadie los inquiete, se tomarán en serio la deshonra que tuvieron que padecer y la infidelidad que me demostraron.

27. Cuando los haga volver de entre los pueblos y los reúna de los países de sus enemigos, pondré de manifiesto mi santidad por medio de ellos, a la vista de numerosas naciones.

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