11. ¡Que el Señor, el Dios de sus antepasados, los haga mil veces más numerosos todavía y los bendiga como les ha prometido!
12. Pero, ¿cómo podré yo solo sobrellevar sus cargas, sus disputas y pleitos?
13. Elijan de cada tribu hombres experimentados, que sean conocidos por su sabiduría y prudencia y yo los pondré al frente de ustedes».
14. Ustedes me respondieron: «Estamos de acuerdo con lo que nos propones».
15. Entonces elegí de entre los jefes de las tribus a algunos hombres sabios y experimentados, y les di autoridad sobre ustedes. A unos los puse a cargo de grupos de mil hombres; a otros, a cargo de cien; a otros, de cincuenta; a otros, de diez, y a otros los nombré oficiales responsables de cada tribu.
16. Al mismo tiempo, di a los jueces estas normas: «Escuchen a sus hermanos y administren justicia cuando tengan pleitos entre ellos o con extranjeros.