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2 Crónicas 34:9-15 La Palabra Versión Hispanoamericana (BLPH)

9. Ellos se presentaron al sumo sacerdote Jilquías con el dinero ingresado en el Templo y recogido por los levitas porteros en Manasés y Efraín, en el resto de Israel, en todo Judá y Benjamín y en Jerusalén;

10. dinero que entregaron a los encargados de las obras del Templo, para que pagasen a los obreros que llevaban a cabo la reparación de los desperfectos del Templo.

11. Se lo dieron a los carpinteros y constructores para comprar piedras labradas y madera de carpintería para las vigas de los edificios arruinados por la desidia de los reyes de Judá.

12. Estos hombres hacían su trabajo con honradez, bajo la supervisión de los levitas Jájat y Abdías, del clan de Merarí, y de Zacarías y Mesulán, del clan de Queat, que los dirigían. Los levitas, todos ellos expertos en instrumentos musicales,

13. dirigían a los acarreadores y a todos los trabajadores en cada una de sus tareas. Otros levitas eran secretarios, inspectores y porteros.

14. Cuando estaban sacando el dinero ingresado en el Templo, el sumo sacerdote Jilquías encontró el Libro de la Ley del Señor escrito por Moisés.

15. Jilquías comunicó al secretario Safán:—He encontrado en el Templo el Libro de la Ley.Y Jilquías entregó el libro a Safán.

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