11. David siguió huyendo aquel día lejos de Saúl y llegó donde Aquís, rey de Gat.
12. Los servidores de Aquís le dijeron:—Ese es David, el rey del país*, al que le cantaban bailando aquello de «Saúl mató a mil y David a diez mil».
13. David se preocupó por aquellos comentarios y sintió miedo de Aquís, el rey de Gat.
14. Entonces modificó su aspecto y se hizo el loco ante ellos arañando las puertas y dejando que la baba le chorreara por la barba.
15. Aquís dijo a sus criados:—¿No ven que ese hombre está loco? ¿Para qué me lo han traído?
16. ¿No tengo ya bastantes maniáticos, para que me traigan uno más a hacer tonterías en mi presencia? ¿Qué pinta este en mi palacio?