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1 Reyes 1:42-53 La Palabra Versión Hispanoamericana (BLPH)

42. Mientras hablaba llegó Jonatán, el hijo del sacerdote Abiatar, y Adonías le dijo:—Entra, que tú eres persona influyente y traerás buenas noticias.

43. Pero Jonatán le respondió:—¡Todo lo contrario! Nuestro señor, el rey David, ha proclamado rey a Salomón.

44. El rey ha mandado al sacerdote Sadoc, al profeta Natán, a Benaías, el hijo de Joyadá, a los quereteos y a los peleteos y lo han montado en la mula del rey.

45. Luego el sacerdote Sadoc y el profeta Natán lo han consagrado en Guijón y han subido desde allí muy alegres. La ciudad anda alborotada: esa es la razón del griterío que han oído.

46. Además, Salomón ha tomado posesión del reino

47. y los servidores reales han ido a felicitar al rey David, diciendo: «¡Que tu Dios haga a Salomón más famoso que a ti, y que haga su reino más poderoso que el tuyo!». Incluso el rey ha hecho una reverencia en su lecho

48. y ha dicho: «¡Bendito sea el Señor, Dios de Israel, que ha permitido hoy que alguien se siente en mi trono y que yo lo pueda ver!».

49. Todos los invitados de Adonías se echaron a temblar, se levantaron y se dispersaron.

50. Adonías, temiendo a Salomón, se levantó y fue a refugiarse al amparo del altar.

51. Alguien informó a Salomón:—Adonías, por miedo al rey Salomón, se ha refugiado al amparo del altar, pidiendo al rey que le jure hoy mismo que no va a matar a su siervo.

52. Salomón respondió:—Si actúa como un hombre de bien, no se le tocará ni un pelo; pero, si se le descubre en falta, morirá.

53. Entonces el rey Salomón mandó que lo sacaran del altar. Luego él llegó a rendirle homenaje. Pero Salomón le dijo:—¡Vete a tu casa!

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