4. Y lo que dice la Escritura se escribió para enseñanza nuestra, a fin de que, uniendo nuestra constancia al consuelo que proporcionan las Escrituras, mantengamos la esperanza.
5. Ojalá que Dios, la fuente de la constancia y del consuelo, os conceda vivir en mutua armonía, según el ejemplo de Cristo
6. para que todos juntos y a una sola voz alabéis a Dios, Padre de nuestro Señor Jesucristo.