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Lucas 7:4-10 La Palabra Versión Española (BLP)

4. Los enviados acudieron a Jesús y le suplicaban con insistencia:— Este hombre merece que lo ayudes,

5. porque ama de veras a nuestro pueblo. Incluso ha hecho construir a sus expensas una sinagoga para nosotros.

6. Jesús fue con ellos. Estaba ya cerca de la casa, cuando el oficial le envió unos amigos con este mensaje:— Señor, no te molestes. Yo no soy digno de que entres en mi casa.

7. Ni siquiera me he creído digno de presentarme personalmente ante ti. Pero una sola palabra tuya bastará para que sane mi asistente.

8. Porque yo también estoy sujeto a la autoridad de mis superiores, y a la vez tengo soldados a mis órdenes. Si a uno de ellos le digo: «Vete», va; y si le digo a otro: «Ven», viene; y si a mi asistente le digo: «Haz esto», lo hace.

9. Al oír esto, Jesús quedó admirado de él. Y dirigiéndose a la gente que lo seguía, dijo:— Os aseguro que ni siquiera en Israel he encontrado una fe tan grande como esta.

10. Y cuando los enviados regresaron a la casa, encontraron curado al asistente.

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