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Lucas 16:20-29 La Palabra Versión Española (BLP)

20. Y había también un pobre, llamado Lázaro que, cubierto de llagas, estaba tendido a la puerta del rico.

21. Deseaba llenar su estómago con lo que caía de la mesa del rico y hasta los perros se acercaban a lamerle las llagas.

22. Cuando el pobre murió, los ángeles lo llevaron al seno de Abrahán. Tiempo después murió también el rico, y fue enterrado.

23. Y sucedió que, estando el rico en el abismo, levantó los ojos en medio de los tormentos y vio a lo lejos a Abrahán y a Lázaro en su compañía.

24. Entonces exclamó: «¡Padre Abrahán, ten compasión de mí! ¡Envíame a Lázaro, que moje en agua la punta de su dedo y me refresque la lengua, porque sufro lo indecible en medio de estas llamas!».

25. Abrahán le contestó: «Amigo, recuerda que durante tu vida terrena recibiste muchos bienes, y que Lázaro, en cambio, solamente recibió males. Pues bien, ahora él goza aquí de consuelo y a ti te toca sufrir.

26. Además, entre nosotros y vosotros se abre una sima infranqueable, de modo que nadie puede ir a vosotros desde aquí, ni desde ahí puede venir nadie hasta nosotros».

27. El rico dijo: «Entonces, padre, te suplico que envíes a Lázaro a mi casa paterna

28. para que hable a mis cinco hermanos, a fin de que no vengan también ellos a este lugar de tormento».

29. Pero Abrahán le respondió: «Ellos ya tienen lo que han escrito Moisés y los profetas. Que los escuchen».

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