Antiguo Testamento

Nuevo Testamento

Juan 7:23-30 La Palabra Versión Española (BLP)

23. Si, pues, circuncidáis incluso en sábado para no quebrantar una ley impuesta por Moisés, ¿por qué os indignáis tanto contra mí que he curado por completo a una persona en sábado?

24. No debéis juzgar según las apariencias; debéis juzgar con rectitud.

25. Así que algunos habitantes de Jerusalén comentaban:— ¿No es este al que desean matar?

26. Resulta que está hablando en público y nadie le dice ni una palabra. ¿Será que nuestros jefes han reconocido que verdaderamente se trata del Mesías?

27. Pero cuando aparezca el Mesías, nadie sabrá de dónde viene; en cambio, sí sabemos de dónde viene este.

28. A lo que Jesús, que estaba enseñando en el Templo, replicó:— ¿De manera que me conocéis y sabéis de dónde soy? Sin embargo, yo no he venido por mi propia cuenta, sino que he sido enviado por aquel que es veraz y a quien vosotros no conocéis.

29. Yo sí lo conozco, porque de él vengo y es él quien me ha enviado.

30. Intentaron entonces prenderlo, pero nadie se atrevió a ponerle la mano encima, porque todavía no había llegado su hora.

Leer capítulo completo Juan 7