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Juan 18:16-30 La Palabra Versión Española (BLP)

16. Pedro, en cambio, tuvo que quedarse afuera, a la puerta, hasta que salió el otro discípulo, el conocido del sumo sacerdote, habló con la portera y consiguió que lo dejaran entrar.

17. Pero la criada que hacía de portera se fijó en Pedro y le preguntó:— ¿No eres tú de los discípulos de ese hombre?Pedro contestó:— No, no lo soy.

18. Como hacía frío, los criados y los guardias habían encendido una hoguera y estaban allí de pie, calentándose. También Pedro se quedó de pie junto a ellos, calentándose.

19. El sumo sacerdote interrogó a Jesús sobre sus discípulos y sobre su enseñanza.

20. Jesús le respondió:— Yo he hablado siempre en público a todo el mundo. He enseñado en las sinagogas y en el Templo, donde se reúnen todos los judíos. No he enseñado nada clandestinamente.

21. ¿A qué viene este interrogatorio? Pregunta a mis oyentes; ellos te informarán sobre lo que he dicho.

22. Al oír esta respuesta, uno de los guardias que estaban junto a Jesús le dio una bofetada, al tiempo que lo increpaba:— ¿Cómo te atreves a contestar así al sumo sacerdote?

23. Jesús le replicó:— Si he hablado mal, demuéstrame en qué; pero si he hablado bien, ¿por qué me pegas?

24. Entonces Anás envió a Jesús atado a Caifás, el sumo sacerdote,

25. mientras Simón Pedro seguía allí de pie, calentándose. Alguien le preguntó:— ¿No eres tú también uno de los discípulos de ese hombre?Pedro lo negó diciendo:— No, no lo soy.

26. Pero uno de los criados del sumo sacerdote, pariente de aquel a quien Pedro cortó la oreja, le replicó:— ¿Cómo que no? ¡Yo mismo te vi en el huerto con él!

27. Pedro volvió a negarlo. Y en aquel momento cantó un gallo.

28. Condujeron a Jesús de casa de Caifás al palacio del gobernador*. Era muy de mañana. Los judíos no entraron en el palacio para no contraer una impureza legal que les habría impedido participar en la cena de Pascua.

29. Por eso tuvo que salir Pilato para preguntarles:— ¿De qué acusáis a este hombre?

30. Ellos le contestaron:— Si no fuese un criminal, no te lo habríamos entregado.

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