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Hechos 2:15-27 La Palabra Versión Española (BLP)

15. Estos no están borrachos como vosotros suponéis pues solo son las nueve de la mañana.

16. Lo que sucede es que se está cumpliendo lo anunciado por el profeta Joel:

17. En los últimos días, dice Dios, concederé mi Espíritu a todo mortal: vuestros hijos y vuestras hijas hablarán inspirados por mí; vuestros jóvenes tendrán revelaciones y vuestros ancianos soñarán cosas extraordinarias.

18. A los que me sirven, tanto hombres como mujeres, otorgaré en aquellos días mi Espíritu, y hablarán inspirados por mí.

19. Haré prodigios en el cielo y milagros en la tierra: sangre, fuego y vapor humeante.

20. Antes que llegue el día del Señor, grande y glorioso, el sol se convertirá en tinieblas y la luna en sangre.

21. Y todo el que invoque al Señor, obtendrá la salvación.

22. Escuchad esto, israelitas: Jesús de Nazaret fue el hombre a quien Dios avaló ante vosotros con los milagros, prodigios y señales que, como bien sabéis, Dios realizó entre vosotros a través de Jesús.

23. Dios lo entregó conforme a un plan proyectado y conocido de antemano, y vosotros, valiéndoos de no creyentes, lo clavasteis en una cruz y lo matasteis.

24. Pero Dios lo ha resucitado, librándolo de las garras de la muerte. Y es que no era posible que la muerte dominase a aquel

25. a quien se refiere David cuando dice: Sentía constantemente al Señor junto a mí, ya que está a mi lado para impedir que caiga.

26. Por eso se alegra mi corazón, canta gozosa mi lengua y hasta mi cuerpo rebosa de esperanza.

27. Porque no me abandonarás al poder del abismo ni permitirás que tu elegido se corrompa .

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