Antiguo Testamento

Nuevo Testamento

2 Pedro 1:14-20 La Palabra Versión Española (BLP)

14. Sé que muy pronto, según me lo ha dado a conocer nuestro Señor Jesucristo, habré de abandonar este cuerpo mortal.

15. Y precisamente por ello, trabajaré sin descanso para que, después de mi partida, podáis recordar estas enseñanzas en todo momento.

16. Cuando os anunciamos la venida gloriosa y plena de poder de nuestro Señor Jesucristo, no lo hicimos como si se tratara de leyendas fantásticas, sino como testigos oculares de su grandiosidad.

17. Él recibió, en efecto, honor y gloria cuando la sublime voz de Dios Padre resonó sobre él diciendo: «Este es mi Hijo amado, en quien me complazco.»

18. Y nosotros escuchamos esta voz venida del cielo mientras estábamos con el Señor en el monte santo.

19. Tenemos también la firmísima palabra de los profetas, a la que haréis bien en atender como a lámpara que alumbra en la oscuridad hasta que despunte el día y el astro matinal amanezca en vuestros corazones.

20. Sobre este punto, tened muy presente que ninguna profecía de la Escritura puede interpretarse por cuenta propia,

Leer capítulo completo 2 Pedro 1