Antiguo Testamento

Nuevo Testamento

2 Corintios 12:7-16 La Palabra Versión Española (BLP)

7. a causa de revelaciones tan extraordinarias.Precisamente para que no se me suban los humos a la cabeza, tengo una espina* clavada en mi carne: se trata de un agente de Satanás que me da de bofetadas para que no me ensoberbezca.

8. Tres veces he pedido al Señor que me libre de esto

9. y otras tantas me ha dicho: «te basta mi gracia, porque mi fuerza se realiza plenamente en lo débil». Con gusto, pues, presumiré de mis flaquezas, para sentir dentro de mí la fuerza de Cristo.

10. Por eso me satisface soportar por Cristo flaquezas, ultrajes, dificultades, persecuciones y angustias, ya que, cuando me siento débil, es cuando más fuerte soy.

11. Si he hablado como un insensato, vosotros me forzasteis a ello. En realidad, os correspondía a vosotros dar la cara por mí, pues aunque no soy nada, en nada soy inferior a esos superapóstoles.

12. Ahí están las credenciales de mi apostolado entre vosotros: una constancia a toda prueba acompañada de signos milagrosos, prodigios y portentos.

13. ¿En qué estáis en desventaja con las demás iglesias? ¿En que yo no quise vivir a costa vuestra? ¡Perdonadme, por favor, este agravio!

14. Estoy a punto de haceros mi tercera visita y tampoco esta vez os seré gravoso, pues me interesáis vosotros, no vuestro dinero. Después de todo, corresponde a los padres ahorrar para los hijos, y no los hijos para los padres.

15. Así que gastaré gustosamente cuanto tenga, y me desgastaré yo mismo por vosotros ¿Acaso por amaros yo tanto, me amaréis vosotros menos?

16. Quizás alguno piense que, en efecto, no fui carga para vosotros, pero que, astuto como soy, os hice morder el anzuelo.

Leer capítulo completo 2 Corintios 12