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Levítico 25:37-46 La Palabra Versión Española (BLP)

37. No le prestarás tu dinero con usura ni le cobrarás intereses por proveerle de alimentos.

38. Yo soy el Señor, vuestro Dios, el que os sacó del país de Egipto para entregaros la tierra de Canaán y ser vuestro Dios.

39. Y si un hermano* tuyo que convive contigo se arruina y se vende a ti, no lo harás trabajar como esclavo.

40. Permanecerá contigo como empleado o como residente extranjero y trabajará para ti solo hasta el año del jubileo.

41. Entonces tanto él como sus hijos quedarán libres, y podrá regresar a su familia y a la heredad de sus antepasados.

42. Son siervos míos a quienes liberé de la opresión egipcia y no podrán ser vendidos como esclavos.

43. Por respeto a tu Dios no lo tratarás con dureza.

44. El esclavo o la esclava que puedas tener, deberán pertenecer a las naciones que están a vuestro alrededor; de esas naciones sí podréis comprar esclavos y esclavas.

45. También podréis comprar como esclavos a los hijos y familiares de los extranjeros que han nacido en vuestra tierra y viven entre vosotros; estos sí podrán ser de vuestra propiedad.

46. Además, los podréis dejar en herencia para vuestros hijos, como propiedad hereditaria, convirtiéndolos en esclavos vuestros a perpetuidad. Pero entre hermanos israelitas no os trataréis unos a otros con dureza.

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