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Jeremías 38:13-19 La Palabra Versión Española (BLP)

13. Entonces tiraron de él con las sogas y lo sacaron de la cisterna. Después Jeremías se quedó en el patio de la guardia.

14. El rey Sedecías mandó traer a su presencia al profeta Jeremías, a la tercera entrada del Templo del Señor y, una vez allí, le dijo:—Te quiero preguntar una cosa. No me mientas en nada.

15. Jeremías respondió a Sedecías:—Si te digo la verdad, seguramente me matarás; y si te doy un consejo, no me harás caso.

16. El rey Sedecías hizo un juramento a Jeremías, sin que nadie lo oyera:—¡Por vida del Señor, al que debemos la existencia, que no te mataré ni te entregaré en manos de esos hombres que quieren quitarte la vida!

17. Entonces Jeremías habló así a Sedecías:—Así dice el Señor del universo, Dios de Israel: Si sales y te entregas a los oficiales del rey de Babilonia, conservarás la vida; y además esta ciudad no será entregada a las llamas. Conservarás la vida junto con tu familia.

18. Pero si no sales y te entregas a los oficiales del rey de Babilonia, esta ciudad será entregada en manos de los caldeos y acabará siendo pasto de las llamas. Y tú no conseguirás escapar de sus manos.

19. El rey Sedecías respondió a Jeremías:—Tengo miedo de ser entregado a judaítas que se hayan pasado a los caldeos; pues me maltratarían.

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