Antiguo Testamento

Nuevo Testamento

Jeremías 27:1-8 La Palabra Versión Española (BLP)

1. Al comienzo del reinado de Sedecías, hijo de Josías, rey de Judá, el Señor dirigió la palabra a Jeremías en estos términos:

2. —Así dice el Señor: Hazte unas correas y un yugo, y échatelo al cuello.

3. Envía un mensaje a los reyes de Edom y de Moab, al rey de los amonitas y a los reyes de Tiro y de Sidón. Envíalo por medio de los mensajeros que han llegado a Jerusalén a entrevistarse con Sedecías, rey de Judá.

4. Y ordénales que digan a sus señores: Así dice el Señor del universo, Dios de Israel: Decid a vuestros señores:

5. Yo hice la tierra, el ser humano y los animales que se mueven por la tierra. Lo hice con mi gran poder y con brazo extendido, y se lo doy a quien me parece.

6. Ahora he puesto todos estos territorios en manos de mi siervo Nabucodonosor, rey de Babilonia, y hasta le he sometido los animales del campo.

7. Le estarán sometidas todas las naciones: a él, a su hijo y a su nieto, hasta que también le llegue a su país el tiempo de someterse a numerosas naciones y a reyes poderosos.

8. Y si una nación o reino no se somete a Nabucodonosor, rey de Babilonia, y no pone su cuello bajo el yugo del rey de Babilonia, yo mismo castigaré a esa nación con la espada, el hambre y la peste —oráculo del Señor—, hasta que haya acabado con ellos por medio de él.

Leer capítulo completo Jeremías 27