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Ezequiel 36:1-15 La Palabra Versión Española (BLP)

1. En cuanto a ti, hijo de hombre, profetiza así sobre los montes de Israel: ¡Montes de Israel, escuchad la palabra del Señor!

2. Esto dice el Señor Dios: Por haber dicho el enemigo de vosotros: «Ja, estas alturas eternas han pasado a ser posesión nuestra»,

3. profetiza y diles: Esto dice el Señor Dios: Puesto que todos cuantos os rodean os han devastado y codiciado, hasta el punto de convertiros en propiedad de las restantes naciones, blanco de las habladurías y de la difamación de la gente,

4. escuchad, montes de Israel, la palabra del Señor Dios. Esto dice el Señor Dios a los montes, a las colinas, a los valles y vaguadas, a las ruinas devastadas y a las ciudades abandonadas, convertidas en botín y hazmerreír ante las naciones que los rodean.

5. Sí, esto dice el Señor Dios: Movido por el fuego de mi celo, hablo contra las demás naciones y contra todo Edom, que, con el corazón rebosante de gozo y con el alma henchida de desprecio, se apoderaron de mi país como si fuera posesión suya, para entregar su pastizal al pillaje.

6. Por eso, profetiza sobre la tierra de Israel; di a los montes, a las colinas, a las vaguadas y a los valles: Esto dice el Señor Dios: Aquí estoy, hablando lleno de celo y de cólera, pues habéis tenido que soportar el ultraje de las naciones.

7. Por eso, así dice el Señor Dios: Juro solemnemente que las naciones que os rodean tendrán que soportar sus propios ultrajes.

8. Pero vosotros, montes de Israel, echaréis follaje y produciréis frutos para mi pueblo Israel, pues está a punto de volver.

9. Aquí me tenéis, vuelto hacia vosotros: seréis cultivados y sembrados.

10. Multiplicaré los habitantes de Israel; las ciudades serán habitadas y las ruinas reconstruidas.

11. Multiplicaré personas y animales, que serán numerosos y fecundos. Haré que pobléis el país como antaño y mejoraré la situación que teníais antes; así reconoceréis que yo soy el Señor.

12. Haré que por vosotros —pueblo mío de Israel— transiten personas. Tomarán posesión de ti, te convertirás en su heredad y no volverás a dejarlos sin hijos.

13. Esto dice el Señor Dios: Puesto que dicen de ti que devoras a la gente y que has dejado a tu nación sin hijos,

14. ten presente que ya no devorarás más gente y que tu nación no quedará sin hijos —oráculo del Señor Dios—.

15. No permitiré que se vuelvan a oír los ultrajes que te dirigen las naciones ni que tengas que soportar los insultos de los pueblos; tampoco tu nación se quedará sin hijos —oráculo del Señor Dios—.

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