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Ezequiel 22:13-30 La Palabra Versión Española (BLP)

13. En consecuencia, voy a descargar mi puño contra tus ilegítimas ganancias y contra los criminales que hay entre tus muros.

14. ¿Cuánto durará tu valor? ¿Se mantendrán firmes tus manos durante el tiempo en que yo intervenga contra ti? Yo, el Señor, lo digo y lo hago.

15. Te dispersaré por las naciones, te aventaré por otros países y acabaré con la impureza que hay en ti.

16. Las naciones serán testigos de tu deshonra, y reconocerás que yo soy el Señor.

17. El Señor me dirigió la palabra:

18. —Hijo de hombre: los israelitas se me han convertido en escoria. Todos ellos son cobre, estaño, hierro y plomo metidos en un horno; no son más que escoria.

19. Por eso, así dice el Señor Dios: Por haberos convertido todos en escoria, he decidido juntaros en medio de Jerusalén.

20. Y del mismo modo que se suelen mezclar plata, cobre, hierro, plomo y estaño dentro de un horno*, y se atiza después el fuego para que se fundan, así os juntaré yo lleno de ira y de cólera, y os fundiré.

21. Os juntaré y atizaré contra vosotros el fuego de mi cólera, y os fundiré en su interior.

22. Como se funde la plata dentro del horno, así seréis fundidos dentro de ella, y reconoceréis que yo, el Señor, he derramado mi cólera sobre vosotros.

23. El Señor me dirigió la palabra:

24. —Hijo de hombre, dile [a Jerusalén] lo siguiente: Eres una tierra que no ha recibido lluvia ni se ha empapado el día de mi furor.

25. Los príncipes que residen en ella son como un león rugiente que desgarra su presa. Han eliminado gente, se han apropiado de haciendas y riquezas, han hecho aumentar el número de viudas que la habitan.

26. Sus sacerdotes han violado mi ley y han profanado mis cosas santas: no han separado lo santo de lo profano, no han enseñado a distinguir lo impuro de lo puro; han cerrado los ojos para no ver mis sábados, y yo he sido deshonrado entre ellos.

27. Los nobles que la habitan son como lobos que desgarran su presa, proclives al crimen, a acabar con la gente para sacar provecho de tales situaciones.

28. Sus profetas los cubren de cal a base de visiones falsas y presagios engañosos, cuando dicen: «Esto dice el Señor Dios», y resulta que el Señor no ha hablado.

29. La gente del país se dedica a la explotación y al pillaje, oprimen al pobre y al menesteroso, y explotan a los forasteros privándolos del derecho.

30. He buscado entre ellos uno solo que construyese un muro y que, en defensa del país, se mantuviese en la brecha frente a mí para evitar que yo lo destruyera, pero no he encontrado a nadie.

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