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Éxodo 9:23-29 La Palabra Versión Española (BLP)

23. Moisés alzó su vara* hacia el cielo, y el Señor desató una tormenta con truenos y granizo. Cayeron rayos sobre la tierra, y el Señor hizo que granizara en todo Egipto.

24. Caían los granizos y rayos mezclados con el granizo. Desde la fundación de Egipto no se vio jamás una granizada tan violenta.

25. Aquel granizo destrozó en todo el país de Egipto cuanto se encontraba en el campo —personas y animales—, machacó toda la vegetación y tronchó los árboles.

26. Únicamente el territorio de Gosen, donde vivían los israelitas, se libró del granizo.

27. Entonces el faraón mandó llamar a Moisés y Aarón para decirles:—Reconozco que esta vez he pecado. La culpa es mía y de mi pueblo, no del Señor que es justo.

28. Suplicad al Señor que cesen los truenos y el granizo y no os retendré más. Esta vez os dejaré salir.

29. Moisés le respondió:—En cuanto salga de la ciudad, alzaré mis manos al Señor; los truenos y el granizo cesarán; así reconocerás que la tierra es del Señor.

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