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Ester 9:10-25 La Palabra Versión Española (BLP)

10. que eran los diez hijos de Amán, hijo de Hamdatá, enemigo de los judíos. Los mataron, pero no saquearon sus bienes.

11. Aquel mismo día, al conocer el rey el número de los que habían perecido en la ciudadela de Susa,

12. dijo a la reina Ester:—Si solo en Susa los judíos han matado y aniquilado a quinientas personas, además de los diez hijos de Amán ¡qué no habrán hecho en el resto de las provincias del reino! ¡Dime si quieres algo más, y te lo daré; si deseas algo más, lo tendrás!

13. Ester respondió:—Si al rey le parece bien, permita que se prorrogue hasta mañana el edicto que era válido solo para hoy, de forma que los judíos de Susa puedan colgar en la horca los cuerpos de los diez hijos de Amán.

14. El rey ordenó que así se hiciera. Se promulgó un edicto en Susa, y colgaron en la horca los cuerpos de los diez hijos de Amán.

15. Los judíos de Susa se volvieron a organizar el día catorce del mes de Adar, y dieron muerte allí a trescientas personas más, pero tampoco saquearon sus bienes.

16. Los restantes judíos que vivían en las otras provincias del reino, se organizaron también para defenderse y librarse de sus enemigos; mataron a setenta y cinco mil de ellos, pero no saquearon sus bienes.

17. Esto sucedió el día trece del mes de Adar. El día catorce los judíos descansaron y lo dedicaron a festejarlo con alegría.

18. En cambio, los judíos de Susa descansaron y lo festejaron con alegría el día quince, pues los días trece y catorce habían estado defendiéndose.

19. Esta es la razón por la que los judíos que viven en zonas rurales —los que viven en aldeas— celebran con alegres festejos el día catorce del mes de Adar intercambiándose regalos unos con otros.

20. Mardoqueo consignó estas cosas por escrito y envió cartas a todos los judíos de todas las provincias del rey Asuero, tanto a las próximas como a las lejanas.

21. Ordenaba en ellas que cada año se celebrasen los días catorce y quince del mes de Adar

22. como los días en que los judíos se libraron de sus enemigos, y como el mes en que su aflicción se transformó en alegría y su dolor en fiesta. Por eso debían celebrarlos con festejos alegres e intercambiando regalos unos con otros, y dando limosna a los pobres.

23. Los judíos convirtieron en costumbre este festejo que Mardoqueo había ordenado por escrito y que ellos habían comenzado a celebrar;

24. pues Amán, hijo de Hamdatá, de Agag, el enemigo de los judíos, había maquinado un plan para exterminarlos llevando a cabo un sorteo llamado «pur», para determinar cuándo vejarlos y aniquilarlos:

25. Sucedió, sin embargo, que cuando Ester se presentó ante el rey, este ordenó por escrito que el perverso plan maquinado por Amán contra los judíos recayese sobre su cabeza, con lo que Amán y sus hijos fueron colgados en la horca.

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