10. David le preguntó:—¿Quién me comunicará si tu padre te responde violentamente?
11. Jonatán le dijo:—Salgamos al campo.Y salieron juntos al campo.
12. Entonces Jonatán dijo a David:—Te prometo, por el Señor, Dios de Israel, que mañana o pasado mañana a estas horas sondearé a mi padre y si está bien dispuesto hacia ti, mandaré a informarte.
13. Pero que el Señor me castigue si mi padre ha decidido tu desgracia y no te lo hago saber, para que te pongas a salvo. ¡Que el Señor esté contigo como estuvo con mi padre!
14. Si yo vivo todavía, trátame con el mismo favor divino. Y si muero,
15. no retires nunca tu favor a mi familia, cuando el Señor suprima de la faz de la tierra a todos tus enemigos.
16. Jonatán selló un pacto con la familia de David, diciendo:—¡Que el Señor pida cuentas a los enemigos de David!
17. Y Jonatán juró de nuevo a David por el amor que le tenía, pues lo quería como a sí mismo,
18. diciéndole:—Mañana es luna nueva y se te echará de menos, pues tu asiento estará vacío.
19. Pasado mañana tu ausencia se notará aún más. Entonces te vas al lugar donde te escondiste la otra vez y te quedas junto al montón de piedras.
20. Yo lanzaré tres flechas en esa dirección, como si tirase al blanco;
21. luego mandaré al criado a buscarlas. Si le digo: «Mira, las flechas están más acá, recógelas», entonces puedes venir, pues estás a salvo y no hay peligro, ¡vive Dios!
22. Pero si le digo al mozo: «Mira, las flechas están más allá», entonces márchate, pues el Señor quiere que te vayas.
23. En cuanto a lo que hemos hablado tú y yo, el Señor es testigo entre los dos para siempre.
24. David se escondió en el campo y cuando llegó la luna nueva el rey asistió al banquete
25. y se sentó en su sitio de costumbre, junto a la pared; Jonatán se sentó enfrente y Abner al lado de Saúl. Pero el sitio de David quedó vacío.
26. Saúl no dijo nada aquel día, pues pensó: «Le habrá ocurrido algo, estará impuro y no se habrá purificado».
27. Pero el segundo día, el siguiente de la luna nueva, el sitio de David seguía vacío. Entonces Saúl preguntó a su hijo Jonatán:—¿Por qué no ha venido el hijo de Jesé al banquete ni ayer ni hoy?