Antiguo Testamento

Nuevo Testamento

1 Reyes 17:7-14 La Palabra Versión Española (BLP)

7. Al cabo de un tiempo, el arroyo se secó, porque no había llovido en el país.

8. Entonces el Señor le envió este mensaje:

9. —Dirígete a Sarepta, en Sidón, y quédate a vivir allí, que yo le he ordenado a una viuda que te proporcione comida.

10. Elías se puso en camino hacia Sarepta y a la entrada de la ciudad encontró a una viuda recogiendo leña. Elías la llamó y le dijo:—Por favor, tráeme en una jarra un poco de agua para beber.

11. Cuando iba a buscarla, Elías le gritó:—Por favor, trae también un trozo de pan.

12. Pero ella le respondió:—Te juro por el Señor, tu Dios, que no me queda pan. Apenas me queda un puñado de harina en la tinaja y un poco de aceite en la alcuza. Precisamente estaba recogiendo algo de leña, para ir a cocerlo para mí y para mi hijo. Nos lo comeremos y luego moriremos.

13. Elías le dijo:—No te apures. Anda y haz lo que dices. Pero primero prepárame de ahí un panecillo y tráemelo. Después podrás hacerlo para ti y para tu hijo.

14. Porque el Señor, Dios de Israel, ha dicho que ni la tinaja de harina se acabará ni la alcuza de aceite se vaciará hasta el día en que él mande la lluvia sobre la tierra.

Leer capítulo completo 1 Reyes 17