7. Y Jesús le dijo: "Yo iré y lo sanaré."
8. Pero el centurión respondió: "Señor, no soy digno de que Tú entres bajo mi techo; solamente di la palabra y mi criado quedará sano.
9. "Porque yo también soy hombre bajo autoridad, con soldados a mis órdenes; y digo a éste: 'Ve,' y va; y al otro: 'Ven,' y viene; y a mi siervo: 'Haz esto,' y lo hace."
10. Al oírlo Jesús, se maravilló y dijo a los que Lo seguían: "En verdad les digo que en Israel no he hallado en nadie una fe tan grande.
11. "Y les digo que vendrán muchos del oriente y del occidente, y se sentarán a la mesa con Abraham, Isaac y Jacob en el reino de los cielos.
12. "Pero los hijos del reino serán arrojados a las tinieblas de afuera; allí será el llanto y el crujir de dientes."
13. Entonces Jesús dijo al centurión: "Vete; así como has creído, te sea hecho." Y el criado fue sanado en esa misma hora.
14. Cuando Jesús llegó a casa de Pedro, vio a la suegra de éste que estaba en cama con fiebre.
15. Le tocó la mano, y la fiebre la dejó; y ella se levantó y Le servía.
16. Y al atardecer, Le trajeron muchos endemoniados; y expulsó a los espíritus con Su palabra, y sanó a todos los que estaban enfermos,
17. para que se cumpliera lo que fue dicho por medio del profeta Isaías cuando dijo: "EL TOMO NUESTRAS FLAQUEZAS Y LLEVO NUESTRAS ENFERMEDADES."
18. Viendo Jesús una multitud a Su alrededor, dio orden de pasar al otro lado del mar.
19. Y un escriba se acercó y Le dijo: "Maestro, Te seguiré adondequiera que vayas."
20. Jesús le respondió: "Las zorras tienen madrigueras (cuevas) y las aves del cielo nidos, pero el Hijo del Hombre no tiene dónde recostar la cabeza."
21. Otro de los discípulos Le dijo: "Señor, permíteme que vaya primero y entierre a mi padre."
22. Pero Jesús le contestó: "Ven tras Mí, y deja que los muertos entierren a sus muertos."