Antiguo Testamento

Nuevo Testamento

Marcos 8:25 La Nueva Biblia de los Hispanos (NBLH)

Entonces Jesús puso otra vez las manos sobre sus ojos, y él miró fijamente y fue restaurado; y veía todo con claridad.

Leer capítulo completo Marcos 8

Ver Marcos 8:25 en contexto